Wengué Interiorismo: o cómo decorar a su medida


Wengué Interiorismo, ubicada en calle Lázaro Alonso 14, tuvo unos inicios muy dulces. Así lo recuerda su propietaria, María del Mar Herrero San José. “Este local abrió sus puertas en 1992, con Dulcilandia, algo que todos recordarán, especialmente los niños. Más tarde se lanzó al mercado los cocodrilos del Sequillo, siendo pioneros en souvenir y recuerdos turísticos”.

Pero fue en el año 2004 cuando se dio un giro de 180 grados al negocio y abrió así sus puertas Wengué Interiorismo.  “Era un mundo que conocíamos pues ya veníamos realizado todo tipo de trabajos en diseño, decoración de interiores, como armarios empotrados, cocinas, baños, instalaciones comerciales, reformas integrales, puertas de paso y todo tipo de trabajos relacionados con el sector de la madera como instalaciones comerciales. En venta y diseño se encarga María del Mar y post-venta y trabajos técnicos Antonio, con el taller ubicado en Villanueva de San Mancio”, dice su propietaria.

A pesar de la situación económica actual, Wengué Interiorismo “se mantiene y no nos podemos quejar”, apunta María del Mar Herrero, quien anuncia que actualmente disponen de una “muy buena promoción en armarios empotrados con diseños nuevos y trabajando con melaninas de alta calidad y maderas de 19mm y 30mm”, antes de señalar que son distribuidores de formica Compactop, “lo que significa que mecanizamos las encimeras y podemos personalizar cualquier elemento que deseen como sillas o mesas, por ejemplo”.

Pero no solo de cocinas y muebles vive Wengué. “Nos dedicamos también al mundo de la decoración y al regalo, con lámparas y muebles auxiliares. Además de complementos del hogar y máquinas de coser, con todas las marcas y modelos que existen en el mercado, además de llevar reparación y mantenimiento”, explica Herrero, quien recalca que los presupuestos son sin ningún compromiso y adaptados a las posibilidades del cliente.

Wengué Interiorismo se encuentra muy “satisfecho” con la acogida de sus clientes, especialmente la gente de Rioseco y su comarca “quienes depositan su confianza en nuestra empresa, aunque también trabajamos para cualquier otro lugar de la geografía nacional”, dice la propietaria, quien recuerda alguna curiosidad como aquella vez tuvieron que colocar una campana de extracción de humos frente a los fogones,”porque el cliente la necesitaba para fumar”, o encargos de armarios con medidas “muy extrañas y con cajas fuertes escondidas en su interior”.

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