Un Prendimiento con clara influencia de Caravaggio

Esta pintura pertenece a la Congregación de San Felipe Neri, en cuya sala capitular se conserva. La obra ha sido realizada bajo la indudable influencia de Michelangelo Merisi, más conocido como Caravaggio, aunque la tipificación de los rostros y otros recursos pictóricos apuntan a una interpretación nórdica, en particular a uno de los pintores que formaron parte de la llamada Escuela de Utrech (Holanda), activos durante la primera mitad del siglo XVII. Muchos de ellos se desplazaron a Italia, sobre todo a Roma, entre 1610 y 1640 y conocieron de primera mano la obra de Caravaggio, ya fallecido y a sus seguidores. Fascinados por este nuevo modo de entender la pintura, protagonizada por figuras que surgían del misterio de la penumbra y a las que la luz les proporcionaba una ilusión de realidad inmediata, lo adaptaron a su propia sensibilidad. Uno de los máximos representantes de este grupo, Gerard van Honthorst, repitió el recurso de ocultar el origen del foco de luz mediante una colocación de un personaje por delante, como se aprecia en esta obra.

La composición horizontal, como figuras de medio cuerpo, que permiten una aproximación más intensa al drama representado, el denso ambiente nocturno, iluminado bruscamente por un foco de luz que concentra la atención en el beso de Judas, y la caracterización de los captores de Cristo como soldados revestidos con corazas animadas por el fulgor del reflejo metálico ponen en relación todas estas pinturas, a las que cabría añadir la que aquí se expone. En ésta la escena se interpreta de modo más sereno, sin el dramatismo, el dinamismo y la variedad cromática del modelo caravaggiesco. Aún así, el lienzo vallisoletano posee una sobresaliente calidad, con un interés artístico reforzado por la escasez de pintura holandesa en España, especialmente de esta tendencia tenebrista.

El Prendimiento. Anónimo ¿Escuela de Utrech?
Primera mitad del siglo XVII. Óleo sobre lienzo. 234 x 250 cm.
Iglesia de San Felipe Neri (Valladolid).