Un colorido desfile cinéfilo cierra un campamento de película

Un total de 75 niños han pasado doce días disfrutando del popular campamento urbano riosecano, que este año giraba en torno al mundo cinematográfico

Laura Alonso Guerra. Fotos: Fernando Fradejas

IMG_9126Luces, cámaras, ¡acción! El pabellón del Polideportivo Municipal se ha convertido este viernes en un auténtico festival cinematográfico, con motivo de la celebración del tradicional desfile que cierra el popular campamento urbano de la Ciudad de los Almirantes. De esta manera, los niños participantes, siguiendo las indicaciones de sus monitores, fueron deleitando a los presentes con diversos disfraces, que hacían referencia a las películas más taquilleras de los últimos tiempos. Y es que este año, bajo el lema Un verano de cine, el campamento urbano ha girado en torno al ámbito más peliculero.

2Así, por el parqué del pabellón corretearon pequeños y divertidos Minions. Por su parte, los más mayores inundaron la pista de la elegancia y la destreza características de Charles Chaplin y el frío más animado llegó con las sonrisas de los niños disfrazados del rey de los reyes en el mundo de los vampiros: Drácula. Tampoco faltaron los intrépidos y veloces movimientos del mítico Superman, que sobrevolaron el pabellón cubierto. La banda sonora de cada una de las películas acompañó los coloridos desfiles y las animadas coreografías que realizaron algunos grupos de niños. El resultado final, a juzgar por los aplausos de padres y familiares, y por las sonrisas de los pequeños actores, fue del agrado de todos.

1“El balance es muy positivo, todos se han ido muy contentos y se lo han pasado muy bien”, afirma Virginia Benavides, coordinadora del campamento. Posteriormente, con la entrega de diplomas a todos los participantes, por parte de los tenientes de alcalde, María San José y David Esteban, y del alcalde de Medina de Rioseco, Artemio Domínguez, se puso fin a doce días de diversión que han dado vida a un campamento, que este año más que ningún otro, ha sido de película.

Y es que los niños han tenido la oportunidad de disfrutar de diferentes talleres, juegos y excursiones. “Lo que más les ha gustado es la excursión a Matallana. Había muchos niños que nunca habían estado y les gustó mucho; y también el taller de cine. Les llevamos al Ayuntamiento y allí les enseñamos los inicios del cine a grandes rasgos y después prepararon ellos unas actuaciones”, detalla Virginia. A su vez, Sheila Nieto, una de las monitoras, cuenta que tanto ellos como los niños se lo pasaron en grande con la fiesta del agua. “Hicimos guerra de globos, nos deslizamos con la lona y les dimos una sorpresa con el encierro improvisado que les preparamos. Disfrutamos todos mucho sobre todo los dos americanos  que han estado ayudándonos”, asegura. Además, la noche del jueves, día 23, niños y monitores acamparon en el pabellón para pasar una velada cargada de actividades nocturnas. Una experiencia única y especial para aquellos participantes que nunca habían pasado una noche fuera de sus casas y sin la compañía de sus padres o familiares que tal y como aseguran Sheila y Virginia fue “muy buena y divertida”.

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