Un ‘Capricho’ de 110 años en el corazón de la Calle Mayor


Hablar de El Capricho en Medina de Rioseco es hacerlo de toda una institución, al menos comercialmente hablando. Y es que esta mercería y juguetería riosecana lleva la friolera de aproximadamente 110 años en el corazón de la calle Mayor de Medina de Rioseco.

Las hermanas Pilar, Ana y Carmen Herrero Galván se han convertido en la tercera generación al frente del negocio. “Empezaron nuestros abuelos, luego nuestros padres hasta que nosotras nos hemos hecho cargo del negocio”, dice una de sus actuales propietarias. Comenzó siendo un bazar, aunque la juguetería y la lencería pronto se incorporaron a la tienda. Progresivamente en las últimas décadas se ha ido introduciendo ropa infantil y también deportiva.

Entre las muchas anécdotas que guarda este histórico comercio riosecano, fue un suceso acontecido en 1977. “Dos chavales bajaban en moto por la calle de Santa María (frente al establecimiento) y se empotraron en la luna del comercio. La gente entonces se inventó un dicho muy popular: han bajado dos en moto y han ido a la luna por el capricho”, dice una de las dependientas, quien también recuerda que “no hace mucho tiempo una señora se dejó olvidado un carrito con su bebé”, recuerda con una sonrisa.

A pesar de la situación de crisis actual, el negocio se mantiene, atendiendo a sus especialidades: moda infantil, mercería, juguetes e hilos. Y es que El Capricho se ha convertido en lugar de cita obligada para las compras de los riosecanos. ¿Quién siendo niño no se acuerda del momento mágico de visitar la exposición de juguetes en la antigua trastienda? O ¿de echar la carta a los Reyes en ese buzón, aún existente, que tomaba forma de Mago de Oriente?

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