Rioseco viaja en el tiempo al Mercado de la Vieja India Chica

La decimoquinta edición de la feria medieval riosecana arrancó esta mañana con buen tiempo y con más de un centenar de puestos participantes

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Medina de Rioseco viajó hoy en su particular máquina del tiempo para retroceder más de 500 años, concretamente hasta finales del siglo XV, la época más esplendorosa riosecana, para rememorar las archiconocidas ferias y mercados de la vieja India Chica que permitieron que la Ciudad de los Almirantes fuera conocida en todo el reino. Más de un centenar de puestos de alfayates, jubeteros, armeros, joyeros, taberneros, mercaderes y artesanos fueron abriendo sus lonjas a primera hora de la mañana para dar inicio a un mercado medieval que cumple su decimoquinta edición.

En esta ocasión una de las principales novedades tal y como relataba el alcalde del municipio, Artemio Domínguez, es que el mercado ha crecido y ha ocupado una calle tan emblemática como la de Santa María. Desde de la concejalía de Turismo del Ayuntamiento se insistía en que en esta edición, aprovechando también Las Edades del Hombre, se confía en superar los más de 20.000 visitantes que se acercaron a Medina de Rioseco otros años.

Los Saltimbanquis y los músicos de Longa Organa, las milagreras con sus remedios caseros un tanto extraños y las zanfonas y flautas amenizaban un mercado que a última hora de la mañana comenzaba a recibir visitantes, aunque la organización espera que la tarde-noche del sábado y durante toda la jornada del domingo sea el punto álgido del mercado, en cuanto a participación se refiere.

Hasta el momento, tal y como asegura, Artemio Domínguez “el balance es muy positivo, la gente nos ha hecho llegar sus felicitaciones y el tiempo, sin duda, acompaña”. Los puestos más solicitados esta mañana fueron la docena de tabernas instaladas por todo el recinto y los talleres de artesanía en vivo: fundición de bronce, fragua, caligrafía antigua, vidrio soplado, bolillos y escriño. Además, los más pequeños disfrutaron del Rincón de los Infantes, ubicado en el atrio de Santa Crruz, con la escuela de escuderos, tiovivo y los títeres del Teatro Gatto.

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