‘Pajarito’: «Ahora corto para mí; busco el temple y la elegancia»

El cortador riosecano Alejandro García, segundo el pasado domingo en Medina, afronta el sábado una cita relevante: la Final del Corte Puro en Valladolid

J.A.G.

Alejandro García Pajarito, cortador de Medina de Rioseco, tan sólo tiene 28 años. Pero eso en el mundo de los cortes equivale a la vitola de todo un veterano. No en vano, lleva once temporadas jugándose la piel en cada albero que pisa, sin escatimar riesgos. Sin ir más lejos, el pasado domingo fue segundo en el prestigioso certamen de Medina del Campo. Y aunque no se ha puesto fecha de caducidad, espera que el día de su despedida sea en la plaza de su pueblo, Rioseco, ante su gente y de alguna forma especial, que tan sólo él mismo sabe. Por el momento, aún resta alguna que otra temporada al máximo nivel. Un altísimo nivel que, sin duda, mostrará el próximo sábado en la Final de la Liga del Corte Puro de Valladolid donde revalidará título. Pajarito, uno de los mejores cortadores de España, asegura en esta entrevista concedida a lavozderioseco.com que en esta campaña “estoy cortando para mí, demostrando lo que tengo en la cabeza y como concibo el corte: elegancia, temple y despaciosidad”. Ahí es nada.

¿Qué balance hace de esta temporada?
Un balance muy positivo. Aunque hecho menos concursos, alrededor de una veintena, en prácticamente todos me he metido en las finales y en finales importantes como en el certamen de las Ventas o en Medina del Campo. También he ganado los concursos de Villabuena, Villalpando y Villalar. Creo que he mostrado un nivel muy alto.

La cita más reciente fue el pasado domingo en el concurso de Medina del Campo, uno de los concursos más prestigiosos. Fue segundo con claras opciones de alzarse con la primera posición.
La verdad es que fue un concurso muy bueno, se redujo el número de participantes y se buscó a cortadores que tuvieran unas características más del corte que gusta en Medina, el corte castellano, por eso casi todos éramos de la región y de la zona de Arganda del Rey, que tienen muchas similitudes con nosotros. El concurso fue de menos a más, con series de cuatro participantes y una final de alto voltaje en la que todos los finalistas dimos todo lo que teníamos dentro. Creo que para el jurado fue una papeleta tener que elegir un campeón. Para mí fue una alegría grande ver que los tres primeros clasificados éramos de la zona, primero y tercero de Vezdemarbán [Dani Alonso y Víctor Holgado], a tan sólo 40 kilómetros de Rioseco, y yo en segunda posición. La cosa estuvo muy reñida y el público se lo pasó muy bien.

¿Ha sido el concurso de Las Ventas en Madrid, donde hizo quinto la cita más importante de la temporada?
Junto con la de Medina han sido los dos concursos más importantes, sobre todo porque van mucho con nuestro estilo de corte clásico y plazas en las que más se valora el corte puro, no tanto el espectáculo.

¿Qué sintió al pisar el albero de Las Ventas?
Pues casi como cuando sale un torero, es lo más, es la cumbre, es donde quieres demostrar todo lo que tú sabes hacer a ese público que supones que es entendido.

Este sábado es la final del Corte Puro en Valladolid, que usted ya ganó el pasado año ¿Cómo afronta el compromiso?
Tenía la intención de ir mucho más relajado, pero habiendo hecho segundo en el otro gran concurso, el de Medina, que siempre fue la gran cita en España, y ser el campeón del año pasado de la Liga del Corte Puro en Valladolid, eso provoca que la gente va a estar esperando mi máximo nivel y, por supuesto, que lo daré. Sabemos que es muy difícil volverlo a ganar pero ahí voy a estar y no voy a tirar la toalla.

Y hasta el final de temporada ¿qué queda por delante?
Me quedan algunas citas bonitas como es Valdilecha, Móstoles, El Pilar en Zaragoza, Nava del Rey y Alaejos y algunos otros compromisos que me gusta cumplir con los empresarios de la zona, pero ya a otro tipo de nivel.

Esta temporada la planteó como una temporada para usted, para el disfrute…
Efectivamente una temporada para mí, no queriendo entrar en una batalla como hace años en la que daba lo mismo salir por la puerta de la enfermería que salir andando. Ahora compito para mí, buscando hacer cosas diferentes, lo que tú tienes en la cabeza y lo que piensas que se debería valorar, es eso precisamente lo que estoy intentando demostrar en la plaza: elegancia, temple, despaciosidad.

¿Se ha puesto fecha de caducidad en el mundo del corte?
Soy consciente de que las temporadas se van terminando. Llevo 11 años ya y en muchos concursos soy el más veterano, con 28 años. No obstante, es muy difícil ponerse una fecha, cuando uno se siente torero y todavía se encuentra con fuerzas es muy difícil decir ‘no voy a volver a salir’. Hay que valorar y reflexionar tranquilamente el futuro y cuando llegue el momento de la retirada, asumirlo.

En estos once años en activo ¿ha notado una evolución en el mundo de los cortes?
Sí. Por ejemplo con un corte como el que pude dar en la final de Medina del Campo el pasado domingo hace ocho años ganabas un concurso  y casi seis de toda la temporada. Ahora se exige mucho, aunque se busca mucho el tremendismo, partir las camisetas… Creo que hace falta un poco de pausa, pero el público pide algo de lo que sólo pueden presumir unos pocos elegidos. Ahora quieren a veinte tíos que saben que lo más lejos que se pueden pasar el pitón es a cinco centímetros, y eso es un nivel estratosférico.

En Medina de Rioseco ya no se organiza el concurso de cortes ¿le gustaría volver a cortar en su pueblo?
Me encantaría. Y el día que tome la decisión de despedirme me gustaría poder hacerlo en esta plaza con mi gente, que es a la que siempre llevo muy dentro y a los que me gusta representar cuando voy por plazas de toda España. Ese día me gustaría hacer algo diferente y espero que este deseo se pueda cumplir…

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