Música de calidad como aperitivo a la Semana Santa

La Banda de la Clemencia ofrece su Certamen Nacional Acordes de Pasión
Actuaron la Banda de la Esperanza de Valladolid y la dela Victoria de León

Fotos: José Ignacio Santamaría

Ya es Semana Santa en Medina de Rioseco. Al menos en la ciudad de los Almirantes ya suena a su Pasión. Este domingo, como es habitual, la Banda de Cornetas y Tambores del Santo Cristo de la Clemencia protagonizó su Certamen Nacional Acordes de Pasión, que en esta ocasión cumplía su novena edición, con la participación de la banda anfitriona y la de Nuestra Señora de la Esperanza de Valladolid y la banda del Santísimo Cristo de la Victoria de León.

Las calle Mayor de Rioseco, además de otras como Santa María o Mediana, fueron el escenario perfecto para un vistoso pasacalles con más de 200 músicos que recordaron que la Semana Santa está ya a la vuelta de la esquina. Más tarde, en un abarrotado Teatro Principal, comenzó el certamen que tuvo dos momentos muy emotivos.

El recuerdo al riosecano Vicente Martín, tesorero de la Junta de Cofradías de Semana Santa y responsable de esta banda, del que se cumplía el cuarto aniversario de su fallecimiento. Pero además, el mundo de las bandas de cornetas y tambores estaba de luto. Horas antes, el director de la banda de cornetas y tambores del Calvario de Medina del Campo había fallecido por inhalación de humos. Se tributó un sincero homenaje con la interpretación a cargo de la banda de la Clemencia de la pieza Toque de oración. David Pisador fue amigo y compañero de algunos de los músicos riosecanos.

El certamen comenzó con las piezas de Consuelo, El amor, en el cielo de tu gloria, Madre y Gitano tú eres de Santa María a cargo de la banda vallisoletana de La Esperanza, que tiene un estilo musical referente a la banda del Rosario de Cádiz. El escenario del coqueto Teatro se quedó pequeño para acoger a los más del centenar de componentes que forman la banda del Santísimo Cristo de la Victoria de León, una de las mejores de cuantas existen en el panorama nacional.

Interpretaron marchas propias y trianeras como Penas de Al Andalus, En manos de Jesús, Aquella Virgen de la Calle, Caridad, El alma de la Victoria, Jerusalén y Aguas de Triana. Por último, la banda anfitriona, cerró el certamen con El desprecio de Herodes, Arrepentimiento, Mi Madrugá, Al cielo el rey de Triana, Seña Santana y María Santísima del Rocío.

Julio de las Heras, presidente de la Junta Local de Semana Santa, destacó la importante labor de la música en la Semana Santa y su enorme “orgullo” por el contrario en Rioseco con una banda como la de la Clemencia. Como es costumbre, la Marcha Real puso fin a un certamen donde la calidad musical y la emoción fueron el prólogo perfecto a la Semana Santa que se avecina.

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