Compromiso, ilusión, cercanía y una férrea apuesta por la cantera. Estos han sido los pilares sobre los que ha pivotado la presidencia de Benito Conde y, a su vez, los que han marcado el devenir del Club Deportivo Rioseco en los últimos cuatro años. Mucho se ha especulado sobre la continuidad de Benito al mando de la entidad blanquinegra. Un futuro que se decidirá este viernes 12 de junio en la asamblea de socios, que se celebrará en el salón de actos del Ayuntamiento a las 19.30. En esta completa entrevista, Conde repasa su presidencia y pese a que asegura que no se presentará como candidato a la reelección, no cierra del todo la puerta.
PREGUNTA.- Haznos un resumen de estos cuatro años como presidente.
BENITO CONDE.- Han sido cuatros años en los que me he sentido muy a gusto en el club. Conformé una Junta Directiva, que en un porcentaje muy alto ha llegado hasta estas alturas (nueve de los once iniciales) y que nos llevamos bastante bien entre todos, que ha apostado por el trabajo. Todos hemos sabido cual era nuestro rol y nuestras funciones dentro del club. Así, hemos conseguido que a día de hoy el Rioseco haya tenido, en estos cuatro años, récord de licencias. Por otro lado, hemos conseguido que el primer equipo sea puramente riosecano y también lo es incluso el cuerpo técnico. Esto es algo muy importante que ha ganado en estos cuatro años el club. Algo que hace ocho o diez años era impensable, porque había muchos jugadores de Valladolid, que, por otro lado, no lo critico. Son etapas diferentes. El Rioseco en su día buscaba el objetivo de quedar lo más arriba posible, incluso el ascenso a Tercera. Nosotros teníamos claro que si el Rioseco tenía que bajar a Provincial lo haría con los jugadores de la casa. Aunque siempre pensamos, y este año los números nos han dado la razón, que en Rioseco teníamos calidad y gente de mucho fútbol.
P.- Lo positivo y lo negativo de estos años.
BC.- Lo positivo a nivel de club es que creo que ha cogido todavía mucha más repercusión entre la gente de Rioseco. También son importantes los vínculos que hemos hecho con clubes de fuera: este año volvió a venir el Arenas de Frajanas de Santander con sus cerca de 200 niños a disputar el Torneo de San Juan. Hemos conseguido hacer un muy buen feeling con clubes de Valladolid como el Parquesol, el Arroyo y el Delicias, que nos permite poder jugar amistosos. Otra de las cosas importantes que ha hecho el club es la fundación de la Escuela, que crea un vínculo muy importante para empezar a construir equipos dentro del club. Y para mí es también muy importante que el club hay conseguido mantener el 90% de sus categorías y haber podido conocer a los grandes y buenos compañeros de la Junta Directiva, que cuando empezamos cada uno veníamos de un padre y una madre: A Mario le conocía de saludarnos en el pueblo, a José prácticamente igual, a Toño Morencia llevaba teniendo relación tres o cuatro meses relación con él a través de los niños, con Julián había hablado un par de veces… Y ahora puedo decir que son una parte importante de mí. En lo negativo, está el hecho de haber tomado alguna decisión que luego con el tiempo no sabes si era acertada del todo o si pudiste hacer daño a alguien. Por eso, quiero pedir disculpas a cualquier padre, niño o entrenador que haya sentido que hemos hecho algo con maldad, porque esa nunca ha sido nuestra intención, siempre hemos buscado lo mejor para el club.
P.- ¿Por qué te presentaste como presidente?
BC.- Fue un cúmulo de cosas. Los cuatro años de secretario no han sido los más brillantes de mi vida estando vinculado a algo, creo que lo podía haber hecho mejor. También a mí la situación me pilló siendo muy joven. Me ofrecieron estar en la Secretaría del club y acepté. En los últimos años, el club bajó en número de niños y algo también en el número de socios, pilló la crisis económica de lleno, entonces había menos vallas publicitarias. Y cuando acabábamos no había nadie con la intención de seguir. Tengo que reconocer que si me presenté es porque algunos padres me dijeron que por qué no me animaba, que creían que lo podía hacer bien. Y después de hablarlo con la que acababa de ser mi mujer, pues decidí presentarme.
P.-Si pones la vista atrás ahora, con todo lo vivido, ¿volverías a tomar la misma decisión de presentarte?
BC.- Sí, sin duda. Porque he ganado muchas cosas. Yo no debo nada al Rioseco, seguramente el día que me vaya sea yo el que me acuerde del Rioseco, porque me ha enriquecido mucho. Me ha dado la oportunidad de conocer mucha gente fuera de Rioseco (presidentes, secretarios, personal de la Federación) y también gente de Rioseco que en circunstancias normales de la vida no me hubiese acercado tanto a ellos.
P.- Ser presidente del Rioseco, para ti, ¿ha tenido más ventajas o inconvenientes?
BC.- Ha tenido sobre todo ventajas. Tampoco puedo decir que cuando estuve de secretario tuviese desventajas. Creo que de todo en la vida se aprende y todo a este nivel te puede enriquecer. Lo que pasa que bueno cuando ya llevas ocho años, cuatro en una posición y cuatro en otra; te planteas que ya tienes que dedicarte a otra cosa, te nacen nuevas ilusiones en la vida y tampoco se puede estar permanentemente en un puesto. Y que yo he dicho siempre que lo sano es que cada cuatro u ocho años, sobre todo, en entidades como el Rioseco, es que vaya pasando gente por ella.
P.- ¿Es difícil compaginar la labor de presidente con tu vida personal y profesional?
BC.- Con la laboral lo adaptas porque lógicamente no vas a dejar de trabajar por estar en el club. Sí que tengo que reconocer que cuando estaba en la anterior empresa, a veces, sobre todo en verano cuando había que hacer las licencias, me pedía hasta días de vacaciones para dedicárselas al club. Pero sobre todo lo que es difícil es conciliar la vida familiar, porque la laboral sabes que tienes que trabajar para vivir. El resto de horas del día tenía que organizarlas para conciliar mi vida con el Rioseco. Y yo muchas veces he dedicado muchas más horas al fútbol de las que tenía que haberle dedicado, mi implicación ha sido siempre al máximo. Es muy difícil, es lo más complicado de esto: saber que tienes que tener esa dedicación y que hay tiempo que no puedo dedicar a mi mujer y a mi hija por tener que hacer cosas para el club.Pero tengo mucha suerte de tener la mujer que tengo, que ha sido súper comprensiva conmigo. Sería mentir decir que no ha generado alguna pequeña discusión, pero en líneas generales lo ha comprendido e incluso si ha tenido que sellar lotería lo ha hecho y en ese sentido le tengo que dar las gracias.
P.- ¿Cuál ha sido la filosofía del club desde que llegaste?
BC.- Nuestra filosofía a nivel deportivo era que queríamos que el espejo fuese el primer equipo. Queríamos hacer el Rioseco de gente de Rioseco, que el aficionado que venía a la banda intentase ver al mayor número de gente del pueblo. Con esto no quiero decir que no tenga que venir gente de fuera, porque los que vienen dan un salto de calidad al grupo, pero la base es de la casa. Luego estaba la parte económica que como buen tesorero Antonio Martín siempre me lo dice: “Tenemos que adecuar el gasto, al ingreso”. Es algo que hemos llevado a rajatabla. Y a día de hoy, el Rioseco tiene saneadas sus cuentas y cumple sus presupuestos. Es cierto que no sobra dinero, pero no se deja de pagar a nadie.
P.- ¿Cuál ha sido lo más difícil de gestionar en estos años?
BC.- El tema económico. Tú cuando empiezas el año no sabes cómo te van a responder los socios ni las subvenciones, no sabes cómo van a ir las vallas publicitarias ni cuántos niños vas a tener en el club. Tú sabes que una vez que inscribes a un equipo en Regional te supone al menos una decena de autobuses y que cada arbitraje son casi 400 euros. Es decir, cuentas con 30.000 euros de gasto fijo. Y ese año sabes que, por lo menos, tienes que sacar eso. Y en lo deportivo, todos los veranos nos hemos tirado de los pelos con la confección de la plantilla del primer equipo y para encontrar entrenadores para el fútbol base; que es complicado que se comprometan porque son trabajos altruistas. Pero al final la gente que quiere al club acaba respondiendo.
P.- ¿Cómo es y ha sido el apoyo del pueblo (socios, publicidad, Ayuntamiento…)?
BC.- En el tema socios hemos mejorado. Desde que entramos hemos subido un la lista efectiva de socios que teníamos. Cuando entré había unos sesenta y ahora tenemos más de ciento sesenta. En cuanto a las vallas publicitarias, se ha aumentado también, había entre unas treinta y cuarenta, y ahora tenemos en torno a las sesenta. Tenemos las de gran formato y las que se han puesto en el campo de fútbol siete. Y con el Ayuntamiento el trato ha sido bueno y cordial, recibimos una subvención de 6.000 euros al año, dividida en dos partes (3.000 a principio de año y otros 3.000 a finales).
P.- Centrándonos en esta temporada, ¿qué valoración haces?
BC.-Muy buena. Cada año nos proponemos mantener más o menos todas las categorías. Este año no ha salido Cadete, pero hemos tenido dos de Benjamín. En el primer equipo era no descender y mantenerse en la categoría. Algo que se ha cumplido con creces, pues ha quedado en una muy buena séptima posición. Y en el fútbol base, el Juvenil es un equipo con mucha calidad y el objetivo, también conseguido, era subir a Primera. En los demás equipos, que viniesen a divertirse y a disfrutar, que con los niños es lo más importante. Además, el Benjamín B quedó campeón de grupo. Y en la Escuela que fuesen cogiendo el ritmo de venir al Polideportivo y de estar el balón.
P.- Uno de los grandes logros de tu presidencia ha sido la creación de la Escuela, que supone una apuesta fuerte por la cantera y por la creación de un club puramente de la casa.
BC.-Sí, nosotros hemos hecho todo lo posible por apostar lo máximo por el fútbol base. Otra cosa que introducimos, que antes se hacía a través del Real Valladolid, es el Campus del CD Rioseco, que el año pasado pasamos de los sesenta niños. Y los tres años hemos batido récord de inscripciones. Luego siempre algún niño de los que vienen acaba apuntándose al Club. A dos que se apunten ya es un éxito rotundo. Y sí la Escuela, a nivel futbolístico, es la apuesta más fuerte del Club.
P.- ¿Cómo es tu relación como presidente con jugadores, padres y entrenadores?
BC.- Muy buena. Los entrenadores son, en líneas generales, jóvenes. Y la edad media del club no se dispara mucho de la mía; así que mi relación con todos los jugadores y entrenadores es muy buena. Los padres hay algunos con los que tienes más feeling y otros con los que tienes menos, hay padres con los que antes ya tenía relación y padres con los que la he hecho a través del fútbol. Alguno se ha enfadado conmigo porque no le ha gustado algo que he hecho y les reitero mis disculpas a los que se hayan sentido ofendidos, pero mi relación con la mayoría es buena. Nunca he tenido enfrentamientos ni he estado a malas con ningún padre.
P.- ¿Cómo estaba el Rioseco tanto deportivamente como económicamente cuando llegaste y cómo está ahora?
BC.-Económicamente la situación era convulsa, porque faltaban varias vallas publicitarias de poner y cobrar. Cuando entramos lo cuadramos como pudimos. Y ahora mismo el Rioseco económicamente no debe nada a nadie, está completamente saneado, están renovadas prácticamente todas las equipaciones del fútbol 7 y hace dos años invertimos en material. En lo deportivo esta mas afianzado el tema de categorías inferiores, hay más unión entre equipos, a través de la figura del coordinador, y ha mejorado la comunicación. Y en el primer equipo pues hemos conseguido después de cuatro años un grupo joven, de futuro y de Rioseco y espero que todos sigan el próximo año.
P.- El pasado domingo, 31 de mayo, se acabó tu presidencia, ¿qué planes tienes?
BC.- Llevo vinculado al club de forma muy directa muchos años, desde el 2002 exactamente. No sé qué va a pasar. He hablado con mi Junta Directiva y hay tres de ellos que no van a seguir de ninguna manera. Mi intención es no presentarme a la reelección de Presidente. Y sí que me gustaría que alguno de mis compañeros de la Junta siguiese.
P.- ¿Y con otro cargo?
BC.-Bueno, eso se lo he comentado a algunos de mis compañeros de directiva. Si alguno quiere tirar hacia adelante con la Presidencia y tuviese que estar de una forma casi más como asesor a la hora de decir cómo funciona el club, con la informatización a todos los niveles del futbol base, con el sistema Fénix. Yo puedo seguir en un cargo con menos responsabilidad, por ejemplo una vocalía. E intentar ayudar, si quiere, quien se presente en todo lo que necesite.
P.- ¿Y si no sale nadie?
BC.-Es una pregunta que me ha hecho mucha gente. Todo el mundo me dice eso que si no se presenta nadie…pero yo tampoco puedo tener toda mi vida vinculada a que alguien quiera coger el Rioseco. Algo parecido le ha pasado al Presidente del Navarrés, Ángel, con el que tengo muy buena relación, que me lleva diciendo los ocho años que le conozco “lo dejo este año”, pero como nadie entra lleva ya 20 años. Y yo personalmente no me quiero ver en esa tesitura. El Rioseco tiene que pasar por manos y creo que es hora de un cambio. No obstante, si no sale nadie, habría que valorar si formamos la comisión gestora y tiramos un año más, para ver si en ese tiempo aparece alguien que quiera coger las riendas del club.
P.- ¿Qué le pedirías a la nueva Junta Directiva?
BC.- No soy de pedir mucho. Al fin y al cabo que intentase entrar con la mayor ilusión posible, que intentase también mantener la base que hemos creado para el primer equipo, de gente de la casa y ofrecerle mi apoyo incondicional.
P.- ¿Qué mensaje le mandarías a toda la familia que forma y ha formado el CD Rioseco en estos cuatro años?
BC.- A todos les doy las gracias. A los padres porque aunque ellos a veces miran solo por sus hijos, son los participes de que el Rioseco funcione, por eso mi primer agradecimiento para ellos por hacer que se geste algo tan bonito como el CD Rioseco. A los socios. A los entrenadores mi inmensa gratitud. A las empresas colaboradoras y demás entidades (Ayuntamiento, Bancos…) porque sin ellos no sería posible. A La Voz de Rioseco que siempre he intentado agradecerles el trabajo con el club porque toda la visibilidad exterior que tiene el club es gracias a ellos, con el espacio que gratuitamente nos tienen dedicado. En último lugar, a mi familia personal y a mi otra familia que es mi Junta Directiva, que han sido para mí todo, gente de confianza, los que me han escuchado, me han ayudado… a todos ellos gracias por haberme aportado tanto a título personal.