Los antiguos sayones de La Flagelación, en una muestra

Los antiguos sayones del paso de La Flagelación de Medina de Rioseco, cedidos por la cofradía del mismo nombre y por el Museo de Semana Santa, forman parte desde el pasado jueves de la muestra Imaginería Ligera en Valladolid que, hasta el 24 de abril, se puede visitar en la  Sala Municipal de Exposiciones del Museo del Teatro Calderón.

La exposición, que, organizada por la Junta de Cofradías vallisoletana, cumple con su ya tradicional cita previa a la Semana Santa de la capital, recorre a través de más de una veintena de obras, procedentes de iglesias, conventos, museos e instituciones, los distintos procesos de elaboración de piezas escultóricas relacionadas con la Imaginería Ligera, que se engloba bajo la denominación genérica de «papelón».

El comisario de la muestra, Andrés Álvarez, destacó la «ruptura» que esta exposición constituye en el hilo narrativo de las 12 ediciones anteriores pero ensalzó la posibilidad que ofrece de sacar a la luz una faceta «desconocida» del trabajo de la imaginería y, con ello, propiciar que los restauradores puedan estudiar y entender mejor las alteraciones que sufren algunas de estas obras. Respecto a la obras riosecanas expuestas, los historiadores del arte Ramón Pérez de Castro y Virginia Asensio Martínez, relatan en su estudio sobre la Semana Santa riosecana que la Hermandad de La Flagelación, en 1885, dado el mal estado de los dos sayones existentes, “acuerda hacer dos imágenes nuevas por un escultor desconocido, escotando cada cofrade a razón de una peseta. Al año siguiente ya estaban concluidas las efigies y se pagan 1.619 reales y 80 céntimos por tal concepto y su transporte, además de otros menores como pintar la columna”.

Aquellos sayones, que se han conservado hasta nuestros días, son los que en 1998 fueron sustituidos por otros realizados por el artista vallisoletano Mariano Nieto Pérez, con los que el paso de La Flagelación procesiona actualmente, reservándose los antiguos a su exposición en el Museo de Semana Santa.

Las dos esculturas son obras de cartón piedra y de “artística fealdad” según los describió Esteban García Chico. Por su parte, Pérez de Castro y Asensio Martínez indican que “los soldados romanos azotan con largos pinchos a Jesús, vestidos con faldones de cuero, coraza y tocados por un casco con penachos”.

En la muestra se pueden ver también obras realizadas con pasta de caña de maíz, una técnica empleada por los «indios» incluso de manera previa a la llegada de los conquistadores y usada también en la elaboración de un Cristo crucificado de un anónimo mexicano perteneciente al Convento de Porta Caeli que se exhibe de manera «inédita» en la muestra.

La tela encolada, técnica empleada en la talla ‘Entrada triunfal de Jesús en Jerusalén’ de Francisco Giralte y Francisco Rincón, entre otras piezas de la muestra, o las imágenes de candelero, que se pensaban para ser vestidas, otorgan también espacio a otras técnicas que en la exposición tienen cabida como las realizadas con materiales poliméricos «de última generación» que pueden adaptarse a la imaginería ligera.