La llegada del sol y el buen tiempo renuevan ilusiones


Ya era hora. Sin duda esta fue la expresión que este fin de semana más se escuchó en las calles riosecanas. Una lacónica expresión tras la que se escondía una larga reata de júbilos e ilusiones renovadas, pues ese ya era hora era en verdad ya era hora de que dejara de llover, de que viéramos el sol, de que dejáramos de mojarnos y pasar frío, de poder sentarnos en una terraza, de poder salir al campo a pasear, de que colgáramos las ropas del invierno. En fin, lo dicho, que ya era hora.

share on: