La ATR y sus ‘jóvenes aunque sobradamente preparados’

Jóvenes aunque sobradamente preparados. Así rezaba el título del primer coloquio de las jornadas taurinas Coso del Carmen, organizadas por la Asociación Taurina Riosecana. Y a tenor de lo visto, el matador de toros, Pablo Santana, el novillero; Diego Fernández y el becerrista Carlos Ochoa demostraron –precisamente- estar suficientemente preparados para afrontar con ilusión esta difícil y bonita profesión.

El vallisoletano pablo santana narró cómo fueron sus comienzos, las personas que más le han influido y narró su alternativa el pasado mes de octubre en Mojados, de la mano de Juan Bautista y Morenito de Aranda. Los asistentes al Teatro Principal riosecano disfrutaron de un audiovisual con la faena de su doctorado.

Santana, apoderado por el riosecano Jorge Manrique, dejó entrever que quizá en los próximos días estrene nuevo mentor. Por su parte, el novillero Diego Fernández –nacido en Villada y afincado en Madrid- se sinceró ante el público y relató cómo ha sido su carrera profesional, relanzada con dos compromisos en Las Ventas, en septiembre y octubre, donde dejó una muy buena tarjeta de presentación.

Por último, Carlos Ochoa, un jovencísimo becerrista dejó constancia de que quiere ser torero. Su desparpajo y educación y su ilusión calaron hondo entre el aforo del teatro riosecano quien le dedicó una sonora ovación. Ochoa fue el ganador del pasado certamen de tentaderos Ciudad de los Almirantes, organizado por la peña taurina Jorge Manrique.

La clausura de la primera de las conferencias tuvo lugar con la proyección del audiovisual de la III becerrada benéfica que la asociación taurina organiza cada año por San Juan y que este año recaudó 4.500 euros en beneficio de Cáritas. El alcalde de Rioseco, Artemio Domínguez, tuvo palabras de aliento para los jóvenes que componen esta entusiasta agrupación taurina.