La abuela de Rioseco cumple 101 años

En estos días en que se acerca la Navidad, uno de los deseos más habituales que se oyen es el de que Dios nos de salud para llegar al año que viene. Un deseo que el pasado lunes también tuvo la riosecana Benita Sahagún González en la celebración de sus 101 años de vida.

Con una lucidez envidiable para su longeva edad, una salud de hierro y una vista que la permite leer libros y periódicos sin gafas a diario, Benita señaló estar contenta al cumplir los 101 años pues “lo manad Dios y todo lo que manda Dios hay que recibirlo bien”.

A lo largo de todo el día la centenaria mujer estuvo atendiendo la gran cantidad de llamadas que recibió para felicitarla, entre las que también estuvieron las de sus bisnietos. Para Benita, el 2011 ha sido un año agridulce, ya que a la alegría de ver a su hijo Jesús Hernández ser nombrado canónigo penitenciario de la Catedral de Valladolid y asistir a la boda de su nieto Víctor Pedro, se unía la tristeza de saber que fallecía José Millaruelo, marido de su nieta María del Mar.

Junto a Benita estaba su hija Pilar, quien mostró su gran alegría “por ver a mi madre cumplir una edad tan avanzada, con una salud y una cabeza que parecen mentira”. Un cumpleaños que la centenaria riosecana celebró comiendo abisinios y pasteles de caramelo, “porque siempre me han gustado mucho”.