Gonzalo Franco dibuja “el paisaje del alma” de la Semana Santa

El historiador y colaborador de este diario, Gonzalo Franco Revilla, dibujó “el paisaje del alma” de la Pasión riosecana. Bajo el sugerente título de Ilustres, Ilustrados. Paisaje y Paisanaje en la Semana Santa Riosecana, Franco hizo un recorrido por “aquellas personas con relevancia literaria que han escrito o pregonado la Semana Santa, además de una valoración importante de las personas con un papel destacado en las cofradías que tienen un valor moral”, dijo en su introducción el conferenciante, quien protagonizó la segunda conferencia del Ciclo Patrimonio y Tradición de la Junta de Cofradías.

Miguel de Unamuno, Esteban García Chico o Maurice Legrain fueron los ilustrados, en opinión de Gonzalo Franco, mientras que destacó a otros ilustres, todos pregoneros de la Pasión riosecana, como Rafael Chico Pérez, Félix Antonio González o Godofredo Garabito Gregorio, “todos ellos muy relacionados con el mundo de la prensa”, además de otros como Nicomedes Saez de la Peña, Carlos Urueña, Federico Wattenberg o José Antonio Pizarro de Hoyos, sin olvidarse de la primera mujer pregonera, María Teresa Íñigo de Toro.

Gonzalo Franco quiso referirse también al paisaje, que no tiene por qué ser “un lugar físico, sino más bien emocional, anímico”. Así habló de la noche del Viernes Santo, cuando se reza la salve “un momento donde el tiempo se dilata”, o el “paisaje sonoro”, con las marchas, el sonido del tapetán, el roce de la túnica o el ruido de las horquillas. En su particular paisaje, no olvidó La Rodilla, el olor de los dulces, la luz primaveral, las voces o las iglesias abiertas en la noche, además de “las tallas desfilando e impresionando”.

Siguiendo con el orden de su alocución, luego llegó el paisanaje: “Esas personas, conciudadanos, gente que ha hecho grande la Semana Santa”. Franco hizo una enumeración de algunas de estas personas, en su mayoría ya fallecidas: Javier Alonso, Ramón Pérez de Santiago, Fernando del Olmo, Matías Lobato, Vicente Martín, Bernardino Macón, Julián Álvarez, Pedro García de Hoyos o Teodoro Margareto, sin olvidarse del párroco emérito don Gabriel Pellitero, “un hombre con unos conocimientos de historia del arte impresionantes”.

Por último, el colaborador de La Voz quiso vincular algunos conocidos apellidos riosecanos con las diferentes cofradías y finalizó su intervención con un poema de la riosecana Carmen Leal, titulado La cruz desnuda. Por su parte, el presidente de la Junta de Cofradías, Andrés San José, habló de que “la Semana Santa es la piel de Medina de Rioseco”, mientras que el alcalde Artemio Domínguez, durante su turno de clausura, volvió a hablar de la necesidad de la solicitud de Bien de Interés Cultural Inmaterial para la Pasión riosecana, para proteger algunos ritos.