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Tras los primeros ocho partidos de Liga, el Club Deportivo Rioseco no acaba de despegar. Ya lo advirtió al inicio de la campaña su técnico, el vallisoletano Javier Yepes, que la primera provincial iba a ser esta temporada muy competida por la calidad de algunos de los conjuntos. Los blanquinegros han disputado ocho encuentros, que se han saldado con cuatro victorias, tres derrotas y un empate.
Con estos números que, lógicamente, no son de ascenso, el Rioseco está obligado a mejorar y sobre todo a afinar la puntería. Los datos estadísticos dicen que solo marca un gol cada 80 minutos, aunque el balance ofensivo es positivo, ya que encaja cada 103. Los blanquinegros se acomodan en la zona media de la tabla (13 puntos), aunque están a seis puntos de los que comandan la tabla: El Juventud Rondilla y La Cistérniga, con 19 puntos.
Después de haber encadenado dos derrotas consecutivas (en casa ante el SA Valladolid y en el feudo de la Sur), los riosecanos rompieron esta mala racha el pasado domingo en el Juan Carlos Navarro contra el Navarrés, al que derrotaron con un solitario tanto de Chema, que sirvió para hacerse con tres puntos de oro.
No obstante, los chicos de Yepes tienen que refrendar ese resultado en la visita que rendirán este domingo al CD Mojados, un equipo que se asoma peligrosamente a los últimos puestos de la tabla después de haber logrado tan solo dos victorias. Es importante traerse un buen resultado de Mojados, pues la siguiente jornada recibirán al líder, el Juventud Rondilla. Dos partidos que se antojan claves para el devenir de los blanquinegros que, de ninguna manera, se resisten a abandonar el objetivo del ascenso.
