El equipo de moda se llama Rioseco

“Jamás en mi carrera profesional he entrenado a un equipo que con estas condiciones se ha sobrepuesto a todas las dificultades y los jugadores den el mil por cien. Me siento realizado y es algo que me emociona”, quien habla es el entrenador del Rioseco, Javier Yepes, que resume así la garra que le está poniendo el club albinegro en un nada fácil inicio de temporada y que ha logrado hitos tan importantes como empatar a dos contra el todo poderoso Unionistas o meterle ocho a domicilio a la Sur de Valladolid.

Para que ustedes entiendan mejor de lo que habla Yepes, sirvan estos ejemplos: El Rioseco comenzó su andadura esta temporada el 12 de agosto. El entrenador dice que ahora mismo se está entrenando como si aún fuera pretemporada. La plantilla aún no está completa, prácticamente todas las semanas se han perdido efectivos por lesiones, tarjetas absurdas o incompatibilidad laboral.

Sin ir más lejos, Nico –que metió los dos primeros goles el pasado sábado- jugó el primer tiempo, se duchó y fue directo a trabajar. Alonso ha estado ocho partidos consecutivos sin poder jugar porque no ha podido compatibilizar su trabajo con el fútbol y Suso, el central de Villalón, es monitor y este domingo, en el partido contra el Laguna, podrá llegar tan solo a disputar el segundo tiempo. Para colmo, uno de los mejores jugadores de los riosecanos, Ángel Molina, se fracturó la clavícula y estará un mes más de baja.

Ante todas estas circunstancias cualquier otro entrenador habría tirado la toalla. Pero Yepes, que sabe lo que es sentarse en un banquillo de primera, está disfrutando de lo lindo con el CD Rioseco, es lo que bautiza como “un pequeño milagrito”. Alucina con el compromiso de los suyos, está sabiendo exprimir a cada jugador. Sin ir más lejos, el pasado sábado, en la goleada a domicilio de los blanquinegros a la Sur (0-8) tuvo que sacar al tercer portero de la plantilla, Coque, como jugador de campo. Y cumplió, ya lo creo que cumplió. Algo similar ocurre con los juveniles, como Jorge que firmó un gran encuentro.

A pesar de todas las dificultades, el Rioseco es quinto y Yepes confía en que este no sea el techo. No se conforma. Y cree que tras la Navidad, con el refuerzo de un par de fichajes y con la previsible llegada de Darío y Mario Molina, el equipo crecerá y se verá la verdadero dimensión del equipo. “Confío en que tengamos una segunda vuelta importante”, dice el míster.

La idea de Yepes es aprovechar el “impresionante campo de fútbol con el que contamos”. “Quiero un equipo que juegue por abajo, que mueva la pelota, porque tenemos jugadores de mucha calidad y tenemos que ofrecer un buen juego a los aficionados”.

Este domingo se ven las caras, en otro derbi provincial contra el Laguna. “Hay que hacer bueno el punto obtenido contra el Unionistas y la victoria contra la Sur. Si logramos ganar, tendremos un partido en Peñaranda de bracamonte, a priori más fácil, y podremos dar un salto de calidad”. Javier Yepes pide a la afición que acuda al campo y disfruten con la garra y el buen juego de los riosecanos.