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La festividad de Santa Clara de Asís, quien hace 800 años fundó la Segunda Orden Franciscana, la de las clarisas, es una de las que más fervor despiertan en la ciudad de los Almirantes. Las clarisas de Medina de Rioseco, han celebrado durante nueve días la novena en honor a esta Santa.
El pasado día 11 se le rindió homenaje con una misa solemne y con una procesión por los jardines del Monasterio de Santa Clara de la localidad. La misa comenzó en torno a las 19 horas y fue ofrecida por un predicador que “previamente había designado la comunidad”, apuntaba Sor Piedad. Ismael García, sacerdote superior de los padres jesuitas de Villagarcía, fue el encargado de oficiar esta solemne eucaristía, acompañado de otros sacerdotes.
La procesión por los jardines del convento con paradas en los tres altares que había preparados, uno en el interior de la iglesia y dos en el exterior, para rezar, estuvo amenizada con cánticos en honor a la Santa. Al finalizar estos actos litúrgicos en honor a Santa Clara, las autoridades del municipio son invitadas por la comunidad clarisa a un refresco con pastas, con el que se da por finalizada la festividad.
Las ocho hermanas que en la actualidad habitan el convento, entre las que se encuentran dos mexicanas y dos keniatas, viven este día con “alegría y solemnidad”, tal y como cuenta Sor Piedad. «El día de la víspera ya se nota en el Convento la fiesta, nos levantamos con música de la orden, modificamos un poco nuestros horarios y todos los oficios los hacemos cantando”, cuenta la hermana clarisa.
La comunidad clarisa instalada en Rioseco, lleva ya muchos años haciendo diferentes trabajos para los riosecanos, como por ejemplo el lavado y planchado de las túnicas del Viernes Santo. En este sentido, Sor Piedad añade que “son necesarias vocaciones nuevas porque somos muy pocas y las labores que realizamos son muchas”. Además, apuntó que “sabia nueva siempre rejuvenece”.
