El pasado año fue una de las novedades del Mercado de la India Chica que más convencieron; por eso este año regresaron. Dancefoc, de la compañía teatral Kull d’Sac, puso iluminó la noche medieval riosecana. El fuego, la pirotecnia, la música y los malabarismos se funden en una coreografía en una abarrotada Plaza Mayor que no quiso perderse el plato fuerte de esta decimoquinta edición del mercado medieval riosecano.
Había caído la noche sobre los más de cien puestos de alfayates, jubeteros, joyeros, artesanos y taberneros, cuando el fuego se hizo presente en la Plaza Mayor de Medina de Rioseco. Personajes de otro planeta danzaban con el fuego y un faquir escupía llamaradas para asombro de los más pequeños que no pestañearon durante el espectáculo, rubricado por una colección de pirotecnia y de fuegos artificiales, que anunciaron la importancia de los mercados y ferias de la vieja India Chica.