Así ha quedado la pradera de Castilviejo

Papeleras rotas, contenedores volcados y decenas de kilos de basura esparcidos por la pradera, especialmente botellas y vasos. Este es el resultado del botellón celebrado en la noche del jueves en la ermita de Castilviejo, programado dentro de la fiesta de Quintos, y al que acudió muchas más personas que los riosecanos que cumplen 18 años en 2017. Los responsables del cuidado de la ermita nos han remitido estas fotografías a la sección de fotodenuncias. Según ha podido saber este periódico la fiesta nocturna en la pradera no está autorizada ni por la hermandad de la Virgen de Castilviejo ni por la parroquia.