Alicia Vián: «Las madres somos las sufridoras del Rioseco»


¿Cómo es el papel de una madre en el Club Deportivo Rioseco?
Pues de auténtica sufridora. Empiezan de muy niños no sabiendo nada y poco a poco van mejorando. Sufres porque les ves hacer un gran esfuerzo, cuando ganan tienen recompensa pero cuando pierden a veces ellos lo pasan mal, y las madres pues lo sufrimos con ellos. Pero además de estar a su lado, nos ha tocado limpiar mucho barro, hemos pasado frío, ahora llevamos a los partidos nuestro chocolate y bizcochos y podemos decir orgullosas que les seguimos a todos los partidos, sean dónde sean.

Aunque lo importante en estas edades es que los niños hagan deporte y disfruten…
Yo estoy encantada. Mi hijo y sus amigos tienen ahora 13 años, están en una edad muy mala y para ellos esto es también una responsabilidad: tienen sus días de entrenamiento y lo deben compaginar con los estudios, que eso es lo primero. Pero es cierto que el deporte en estas edades es muy beneficioso y sano porque además les frena en otros hábitos no tan saludables. Nosotras estamos encantadas con que estén en este club haciendo deporte.

Alicia Vián Hernando es la madre de Pablo Álvarez Vián, un joven jugador del CD Rioseco en la categoría de infantil. Empedernida sufridora e hincha del Rioseco, como otras muchas madres del equipo, acompaña a su hijo allá dónde juega. Desde la grada no faltan los ánimos y los cánticos hacia los suyos, ni tampoco un buen chocolate con bizcochos si la tarde es desapacible. Alicia, habla en esta entrevista del papel de las madres en el seno del club y de su hijo Pablo, que milita en el CD Rioseco desde que tenía 6 años. Hoy es un guardameta reconvertido en buen medio centro.

¿Cómo se ve desde la gran familia de madres y padres el Club Deportivo Rioseco?
Estupendo. La labor de Benito Conde, el presidente, y toda la directiva está siendo muy positiva para todo el Rioseco. Los niños están muy contentos, se ve que la gente está poniendo de su parte y las cosas se están haciendo muy bien.

¿Se nota que se está haciendo un buen trabajo con la cantera?
Yo he visto detalles que no había visto nunca en todos los años que lleva jugando mi hijo. Una de las temporadas quedamos subcampeones y nadie de la directiva acudió al último partido y, sin embargo, este año siempre hay alguien pendiente en todos los partidos de casa e, incluso, en alguno de fuera. Y eso gusta a los niños y a los padres.

¿Cómo debe ser el papel de los padres en estas categorías inferiores?
Tenemos que dar ejemplo. Si los padres no damos ejemplo a nuestros niños… Pero es cierto que a veces es difícil y complicado porque oyes comentarios e incluso insultos y eso duele y hay que sujetarse. Pero lo que todos debemos tener claro es que aquí venimos a pasar un buen rato, no a discutir y a disfrutar de nuestros hijos.

Y hablando de fútbol ¿cómo ve al equipo de su hijo?
La verdad es que este año estamos muy bien. Vamos segundos, muy cerquita del primero, con mucha ilusión por intentar ganar la Liga. Los niños poco a poco van madurando, es una edad en la que el cuerpo les va cambiando y la verdad es que se lo toman muy en serio.

Y el entrenador, Julián Pegado, ¿cómo es?
Un poco chinche…(risas) Es muy rígido, se lo toma muy en serio, pero los críos están muy contentos con él y al final es lo importante que entre ellos se entiendan.

¿Qué significa el fútbol para tu hijo?
Yo creo que ahora se ha convertido en un aspecto más en su vida. De pequeños es más un juego y ahora es algo muy importante para ellos.

¿Es Alicia Vián aficionada al fútbol?
Es el deporte nacional y siempre me gustó, pero desde que está mi hijo muchísimo más, claro.

¿Y sigue al primer equipo del CD Rioseco?
Sí, cuando puedo sí. Me hizo muchísima ilusión ir a verlos a Zamora, porque mi hijo es zamorano, aunque criado en Rioseco y encima ganaron. Además yo sé que a los jugadores les hace mucha ilusión que gente de Rioseco se desplace a verlos. Además les hemos acompañado varias veces en Valladolid.

¿Cree posible el ascenso?
Yo creo que sí. A mí me encantaría. Poder llevar el nombre de tu pueblo por muchos lugares es grandísimo, y si encima le puedes dar un mayor nivel y ascender de categoría debe ser la bomba.

En todos estos años de empedernida hincha riosecana habrá tenido muchas anécdotas…
Pues sí, pero hay una muy graciosa: Pablo estuvo muchos años de portero. Y como el campo entonces era de tierra imagínate cuando llovía cómo se ponía. Un día cuando llegó a casa le tuve que meter directo a la bañera, pero vestido completamente y con botas (risas).

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