La primera red de Ciudades catalogadas como Conjuntos Históricos de Castilla y León ya es una realidad. Rioseco propuso lo idea y durante las jornadas que se han celebrado en la Ciudad de los Almirantes durante este jueves y viernes se ha formalizado. Una quincena de regidores, en un principio, han firmado el protocolo por el que se regirán a partir de ahora y asimismo ya han fijado el calendario de próximos encuentros similares al de Rioseco. De esta forma, en 2017 se celebrará en Lerma; en 2018, en Astorga y un año más tarde en Ciudad Rodrigo.
La declaración de Medina de Rioseco, como así se ha dado en llamar, habla del “elevado valor social e identitario” que suponen los conjuntos y el “deber de conservación y protección, desde las políticas municipales”. Creen que estos conjuntos son un “factor positivo” para el desarrollo de las localidades y son necesarios planes de protección y actuación.
Hablan del “binomio turismo y conjuntos Históricos”, así como de la importancia de que los “nuevos elementos arquitectónicos y urbanos” se desarrolle en el “necesario e histórico diálogo entre tradición y contemporaneidad”. Por último, instan a las administraciones públicas a “políticas de desarrollo” en favor de estos Conjuntos y el fomento de la identidad y el compromiso del ciudadano, así como “la formación y la educación de los más jóvenes”.
Esta Red ha sido firmada por los ayuntamientos de Rioseco, Tordesillas, Toro, Frías, Simancas, Cervera de Pisuerga, Lerma, Ponferrada, Astorga, Sepúlveda, Berlanga de Duero, Urueña, Villafranca del Bierzo, Dueñas, Villardeciervos , Sepúlveda y Ciudad Rodrigo. Aunque la Red está abierto a cualquier municipio que se quiera sumar y que atesoro un Conjunto Histórico. De hecho se remitirá el manifiesto a los 120 Conjuntos existentes en la Comunidad.
En la última jornada, este viernes, María de Diego, viceconsejera de Ordenación del Territorio, ha ofrecido una ponencia sobre desarrollo local, mientras que los alcaldes de Astorga, Arsenio García; Lerma, Celia Jiménez; y Frías, José Luis Gómez, han participado en la tercera mesa redonda programada. Ha sido el presidente de la Diputación, Jesús Julio Carnero, el encargado de clausurar el encuentro.
Carnero ha asegurado que los Conjuntos Históricos son “una oportunidad desde el punto de vista económico, gracias a la cultura y al turismo, pero también en la vertiente social”. Aunque también se ha referido a la “responsabilidad” como el deber que tenemos de “entregar a las generaciones futuras los bienes como no solo como los hemos recibido sino mejorados”, ha apuntado el presidente de la Diputación.
Las conclusiones son las siguientes:
El patrimonio no es un problema, es una responsabilidad y una oportunidad
Hacer del cuidado de nuestro patrimonio un activo social.
Paralizar el abandono de los inmuebles del casco histórico
Se hace patente la necesidad de crear una Red que aglutine todos los municipios de Castilla y León declarados Conjunto Histórico para tener una única voz en busca de nuevas oportunidades.
La unión de los municipios como modo de supervivencia de la vida rural
La necesidad de dotar a los Ayuntamiento de herramientas eficaces en la defensa de su patrimonio.
Potenciar el patrimonio como un recursos económico de desarrollo ocal a través del turismo.
Incentivar el emprendimiento dentro de los conjuntos históricos
Implicar a los ciudadanos en particular y a las asociaciones como valor de dinamización social y turística.
Implicar a las administraciones supramunicipales sobre la necesidad de ayudar a las entidades locales en el mantenimiento y recuperación del patrimonio
Necesidad de mantener los servicios básicos en nuestros municipios para fijar población
La necesidad de un consenso entre administración e incitativa privada en el mantenimiento del patrimonio
Seguir trabajando en la detección de problemas comunes a nuestros cascos históricos (despoblación, abandono de inmuebles, aparcamiento, trafico, descentralizar servicios, etc …), para dar soluciones comunes y eficaces