1 de noviembre: día para honrar y endulzar la memoria

La historia del cementerio, la elaboración de huesitos y buñuelos y la tradición de llevar flores a los difuntos, componen este reportaje especial

Quizá uno de los días más entrañables del calendario es el del 1 de noviembre. Tiempo para recordar a los que se fueron y para honrar su memoria con una visita al camposanto de la ciudad. También ese día se acumulan otras costumbres paralelas como el consumo de los típicos dulces de estos días: buñuelos y huesitos de Santos. En este sentido, el primero de noviembre, como es habitual, la corporación del Ayuntamiento de Medina de Rioseco celebrará la tradicional ofrenda floral en recuerdo de todos los fallecidos riosecanos. Tendrá lugar a las 12.30 horas en la cruz central del camposanto de la localidad, en la que también se celebrará un responso a cargo del párroco del municipio.

La historia del camposanto riosecano
El actual cementerio municipal de Medina de Rioseco se inauguró el 15 de abril de 1849 cuando tuvo que ser trasladado el anterior por estar situado en los terrenos donde se iba a construir la dársena del Canal de Castilla. La ampliación del cementerio, situado en la parte posterior del actual camposanto, comenzó hace varios años, concretamente en la primera legislatura del actual alcalde, cuando se adquirió el terreno de casi una hectárea. En una segunda fase se acometió el cercamiento y, por último, se llevó a cabo las obras de nivelación del terreno y la construcción de los nichos y de los panteones, éstos últimos con profundidad para tres sepulturas, cada uno. La ampliación ya tiene desde hace tiempo distintos enterramientos. Sirva este audiovisual para recordar la historia de este sagrado lugar.

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Huesitos de santo… para chuparse los dedos
Uno de los dulces más apreciados estos días son los populares huesitos de santo, un manjar que no faltará en la mesa de muchos riosecanos en el primero de noviembre. Precisamente, lavozderioseco.com ha querido estar presente en el obrador de la Confitería Cubero para asistir al artesanal proceso de la elaboración de este dulce. El proceso es lento y laborioso. En primer lugar hay que conseguir una masa uniforme a base de almendra molida y azúcar, luego laminarla y cortarla en tiras. El siguiente proceso es el de elaborar unos rollitos, que se secarán, se bañarán en almíbar y posteriormente se rellenarán.

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El buñuelo, el dulce estrella de los Santos
Aunque quizá el dulce más consumido estos días sea el buñuelo de viento. Una exquisita y fina masa de harina frita rellena de crema que en Medina de Rioseco se elabora artesanalmente todas las reposterías. Las cámaras de La Voz han entrado en el obrador de La Flor de Castilla para asistir al artesanal proceso de los buñuelos. Nadie se pone de acuerdo para fijar su origen. Algunos investigadores dicen que puede situarse en los Puñuelos que los romanos hacían con sus puños, otros sin embargo sostienen que se trata de un postre típico morisco. Este es audiovisual que narra su proceso.

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Flores para recordar y para alegrar un entrañable día
Y si los dulces son típicos en estas fechas, aún no menos importantes son las flores, que servirán para recordar a los que ya se fueron. Familias enteras se acercan ese día y las jornadas previas hasta el cementerio municipal para depositar sobre las tumbas de sus seres queridos, que han sido acicaladas con anterioridad, ramos, coronas y centros. Adornos florales que permiten a las floristerías vivir su particular agosto, tal y como reconoce la responsable de Floristería y Viveros Carmen de Medina de Rioseco. En este audiovisual muestra el proceso de elaboración de un centro floral típico de estos días y habla de cómo la crisis también está afectando a su sector.

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