Y otro belén, en el Colegio de San Vicente de Paul


Teresa Casquete Rodríguez. Historiadora del arte

Agradecemos a Carmen Carretón el préstamo de estas dos fotografías, que nos permiten continuar con la saga de belenes vivientes de antaño, de los colegios riosecanos. La fecha exacta de éste, organizado en el centro de San Vicente de Paul, no la tenemos, pero está en torno a los años 1982/83.

Algunas de las primeras representaciones de este colegio, se organizaban en el Cine Omy, hasta que con el tiempo, el centro compró parte del patio que había sido Seminario Claretiano y construyó en él, un edificio polivalente, que servía tanto de gimnasio como de teatro, para los actos que se organizaban el Día del Padre, el de la Madre y el de Navidad.

En éste se congregaban los familiares de los alumnos y demás invitados, que atiborraban el lugar, hasta el punto de que, en pleno diciembre, tenían que abrirse todas las ventanas para evitar la condensación de la humedad, que siempre se producía. Las actuaciones se realizaban por cursos, y entre ellas había dos obligatorias: un breve concierto de La Tuna del colegio, y el Belén viviente.

Hay que tener en cuenta que en aquellos años, cada curso estaba formado por unas cuarenta niñas o incluso más, por lo que la profesora encargada de escribir el diálogo tenía que estirarlo al máximo para dar al menos una frase a todas las actuantes.

Al ver las dos fotos nos llaman la atención varias cosas. Que el criterio para la adjudicación de papeles en los belenes era el mismo en todos los centros escolares (el pelo rubio o los ojos azules aseguraban el papel de Virgen, una buena estatura, el de San José y otra menor, el de Niño Jesús). Que el espumillón plateado era el recurso más usado para caracterizar a los niños como personajes principales y como ángeles. Y que el concepto que teníamos de los pastores de la Judea del siglo I DC, distaba mucho de la realidad y nos los imaginábamos vestidos con boinas, cachabas, pantalones de pana y camisas de cuadros, y a sus mujeres con trajes castellanos y coloridos mantones de manila.

En la primera imagen aparecen Alicia Calvo, como San José, Marta Sánchez, como Virgen y Clara Ramos, Carmen Gutiérrez y Carmen Castaño, como ángeles.

En la segunda fotografía podemos ver de izquierda a derecha y de arriba abajo, en la primera fila a Juliana Alonso, Elena Baeza, María Fernández, Carmen de Castro, Carmen Carretón y Eva Jara. En la segunda fila, Magdalena Gutiérrez, Teresa Casquete, Rosario Borjas, Cristina Álvarez, Carmen de la Pinta, Verónica San José y, casi escondida, Asunción Badás. Y en la tercera fila a Lourdes García, Asunción Borjas, Rosario Arellano, Marta Pedrosa, Carmela Álvarez, Ana Alonso (Q.E.D.) y Celia Quiroga.

Se echa de menos en ellas a muchas otras alumnas, que participaron aquel año como pastoras y como Reyes Magos.

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