Las licencias de caza y pesca suben en 2013 hasta un 60%

El año 2013 que acaba de empezar será aún más caro para los amantes de la caza y la pesca, ya que el gobierno regional ha decidido finalmente subir un 60 por ciento las tasas de las licencias de ambas actividades cinegéticas, tal y como anunció hace unas fechas el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, quien se escudó en el incremento como una medida necesaria para garantizar la sostenibilidad tanto del sistema de pesca como de los servicios públicos».

En España, cada comunidad fija la cuantía que debe pagar un cazador o pescador por practicar este deporte en su territorio. De esta forma, según se ha publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León el 28 de diciembre de 2012, el precio para cazar con armas de fuego o cualquier otro procedimiento que no requieran autorización específica costara 42 euros, lo que supone un 66 % más que ahora (27.8 euros); la caza con galgos pasará de 9 euros a 13.50 euros y la licencia de rehala de 117.44 euros a 266 euros. Los pescadores también se verán afectados por esta subida, pues ahora sacar la licencia, 15 euros, será un 60% más caro que en 2012.

Además, hay que considerar que, en muchas ocasiones, quienes practican este deporte lo hacen en más de una región, por lo que tienen que sacarse y renovar las licencias en más de una autonomía. A la licencia de caza, hay que añadir el seguro obligatorio del cazador y el permiso de armas en vigor.

Según los últimos datos recogidos por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, se calcula que en España hay expedidas más de un millón de licencias de caza por valor de 21,5 millones de euros. No obstante, estos datos no recogen el número de permisos de Extremadura, Aragón, Comunidad Valenciana y Asturias.

Para la Federación de Caza de Castilla y León son malas noticias «y máxime cuando desde nuestra entidad estamos reivindicando una descenso del precio de las licencias, tasas y matrículas para los residentes y para los cazadores de Castilla y León», asegura Santiago Iturmendi, presidente de la Federación, que lamenta «la intención del Gobierno regional de acabar con la actividad cinegética». Tampoco ha sido bien acogida por algunos cazadores y pescadores riosecanos quienes creen que esta subida provocará un descenso en el número de permisos.  De hecho, hace 10 años, había 170.000 federados en Castilla y León y ahora son 40.000 menos.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Silván ha confirmado que la decisión, incluida en la Ley de Medidas Tributarias y Administrativas para 2013, responde a una decisión de la Consejería de Hacienda para «acomodar la necesidad de ingresos a esta actividad» y ha reconocido que se trata de un «incremento importante». En cuanto a la nueva Ley de Pesca, Antonio Silván ha confirmado que estará aprobada «a principios de 2013», en la cual se busca que la pesca «no sólo sea una actividad de recreativa o de ocio», sino también «una importante actividad económica por medio del turismo», ya que Castilla y León lidera el número de licencias de pesca continental en España, con 180.000, y genera anualmente «más de cien millones de euros».